Washington (AP) — Estados Unidos entró este miércoles en un cierre federal tras no alcanzarse un acuerdo en el Congreso para financiar sus operaciones. Republicanos y demócratas se culpan mutuamente: los primeros impulsaron una medida temporal para extender el gasto hasta noviembre, pero los demócratas la rechazaron al exigir revertir recortes a Medicaid y ampliar subsidios de salud, lo que los republicanos calificaron como inviable por su costo de más de un billón de dólares.

La Oficina de Gestión y Presupuesto (OMB) notificó a las agencias federales el inicio del proceso de suspensión de labores. Se estima que unos 750,000 empleados federales podrían quedar sin sueldo cada día, con un costo aproximado de 400 millones de dólares diarios, aunque la ley garantiza pagos retroactivos cuando el gobierno reabra.

¿Qué funciona y qué se cierra?

Durante el cierre, las actividades consideradas esenciales continúan. El FBI, la CIA, los controladores aéreos, los agentes en aeropuertos y las Fuerzas Armadas siguen operando. También se mantienen los pagos de la Seguridad Social, Medicare y la atención a veteranos. El Servicio Postal no se ve afectado porque se financia de manera independiente.

En contraste, varias agencias sufrirán parálisis parcial:

• El Departamento de Salud y Servicios Humanos suspenderá al 41 % de su personal. Los CDC seguirán monitoreando brotes, pero detendrán investigaciones preventivas.
• Los Institutos Nacionales de Salud atenderán a pacientes en estudios en curso, aunque no podrán iniciar nuevos ensayos clínicos.
• La FDA reducirá drásticamente sus operaciones, sin aceptar nuevas solicitudes de medicamentos o dispositivos médicos.
• El Servicio de Parques Nacionales mantendrá abiertos caminos y senderos, pero suspenderá a dos tercios de sus empleados. Sitios como Yellowstone o el Gran Cañón podrían cerrar si se acumula basura o daños.
• La Institución Smithsonian, incluidos museos y el Zoológico Nacional, permanecerá abierta al menos hasta el lunes.

Impacto económico

La Oficina de Presupuesto del Congreso advirtió que un cierre breve no afectaría significativamente la economía, pero uno prolongado podría restar hasta 0.2 puntos porcentuales de crecimiento por semana. En episodios previos, los mercados financieros reaccionaron con caídas iniciales antes de estabilizarse.

Mientras tanto, el presidente Donald Trump advirtió que podría “aumentar el dolor” del cierre con recortes irreversibles en programas que favorecen a los demócratas, lo que anticipa un enfrentamiento aún más prolongado.