En 1925 nació una de las compañías de danza más icónicas del mundo: The Rockettes, un grupo femenino especializado en precisión coreográfica, famoso por sus kicks perfectos ―patadas sincronizadas a la altura de los ojos― y por su presencia permanente en el histórico Radio City Music Hall de Nueva York.
Inspiradas en las líneas de baile europeas y en el entretenimiento popular del cambio de siglo —desde el vodevil hasta los primeros espectáculos musicales—, las Rockettes fueron creadas por el coreógrafo Russell Markert, quien buscaba integrar “belleza, disciplina y exactitud matemática” en el escenario.
Un siglo de exactitud y espectáculo
A lo largo de décadas, The Rockettes se convirtieron en un símbolo cultural estadounidense. Su participación en el Radio City Christmas Spectacular, estrenado en 1933, se volvió una tradición invernal para millones de personas. Cada año, miles de bailarinas se presentan a audicionar, pero solo una fracción logra superar las rigurosas pruebas de altura, técnica y resistencia física.
La esencia del grupo es la sincronización absoluta: ninguna bailarina debe destacar por encima de otra. Todo debe verse como un solo cuerpo en movimiento. Esa precisión ha sido su sello durante 100 años.
Una historia también marcada por la exclusión
Durante décadas, la compañía fue criticada por sus reglas estrictas sobre apariencia y uniformidad.
Una de las más polémicas: no contratar bailarinas negras, porque —según la antigua política interna— su presencia “rompía la uniformidad visual”. No fue hasta 1987 cuando se integró la primera bailarina afroamericana, Jennifer Jones, haciendo historia dentro de la agrupación.
En 2019 también dieron un paso significativo hacia la inclusión al admitir por primera vez a una bailarina con discapacidad, ampliando sus estándares de diversidad física y demostrando una evolución hacia un espectáculo más representativo.
De los inicios del entretenimiento moderno al mito contemporáneo
El origen de su éxito se remonta a un cambio global en el ocio popular. A finales del siglo XIX, el público disfrutaba de vodevil, revistas musicales, espectáculos de variedades y los primeros ensayos del cine como forma masiva de entretenimiento. En ese contexto, las Rockettes aportaron algo nuevo: la exactitud geométrica convertida en espectáculo.
Con su estilo depurado, sus uniformes brillantes y su coreografía perfectamente milimétrica, marcaron un antes y un después en la estética del musical norteamericano.
Un siglo después, el mito sigue intacto
Cumplidos 100 años, The Rockettes continúan llenando salas, renovando repertorios y perfeccionando un modelo escénico que sigue cautivando al público. Son parte inseparable de la Navidad estadounidense, del imaginario del Radio City Music Hall y de la historia moderna del espectáculo.
Pocas compañías sobreviven intactas durante un siglo. Ellas lo han logrado, manteniendo su disciplina legendaria mientras se adaptan —lenta pero decisivamente— a los nuevos tiempos.



















Leave a Comment
Your email address will not be published. Required fields are marked with *