728 x 90

La dieta de los presos: el ritual de preparar comida para miles de reos en Sonora

La dieta de los presos: el ritual de preparar comida para miles de reos en Sonora

Hermosillo, Sonora; 30 de julio de 2025.– En 1980, Víctor Hugo Robles ingresó al CERESO 1 de Hermosillo por un delito que asegura no cometió. Durante su condena, encontró propósito en la cocina del penal, donde, junto con otros internos, preparaba alimentos para miles de personas privadas de la libertad.

La cocina del penal se convirtió para él en un espacio de aprendizaje y colaboración. “El cocido, la gallina pinta… eso es lo mejor que había”, recuerda. Su historia refleja cómo un acto tan cotidiano como cocinar puede convertirse en un ritual de resistencia y comunidad dentro del encierro.

Actualmente, el menú penitenciario en Sonora es aprobado por la Secretaría de Seguridad Pública y varía cada dos semanas. Según información obtenida vía la Plataforma Nacional de Transparencia, los desayunos van desde huevos con chorizo hasta avena con pan. Las comidas incluyen pozole, caldo de pollo, frijoles y mortadela. Los alimentos se sirven a las 6:00, 10:00 y 14:00 horas.

Sin embargo, la nutrióloga Ericka Alegría advierte que esta dieta carece de elementos esenciales como pescado, grasas saludables, frutas y vegetales frescos, lo que afecta tanto la salud física como el bienestar emocional de los internos.

A esto se suma el contexto de hacinamiento. Según el Censo Nacional Penitenciario, Sonora es el segundo estado con más cárceles del país (20), pero con una sobrepoblación que alcanza los 10,574 internos, de los cuales casi 40 % no tiene sentencia firme.

Esta situación revela una crisis estructural del sistema penitenciario, donde la alimentación es solo una de las muchas áreas que requieren atención urgente para garantizar condiciones humanas y justas para quienes viven tras las rejas.

Más información:

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked with *