Ganaderos del estado de Sonora manifestaron su preocupación ante el rezago de reses en los corrales de engorda, una situación provocada por los cierres intermitentes en la frontera y agudizada por la falta de lluvias, lo que ha incrementado considerablemente los costos de alimentación.

El representante del sector ganadero en la entidad, Juan Ochoa Valenzuela, explicó que los animales no han podido ser exportados en el momento adecuado, lo que obliga a mantenerlos por más tiempo y genera pérdidas económicas.

“En vez de haberse exportado en el tiempo correcto, tienen que seguir alimentando al ganado hasta un punto donde ya también se volvería incosteable seguirle dando comida, entonces lo tienes que vender al mercado nacional y es ahí donde el productor toma la pérdida”, señaló.

Veterinarios de la comunidad de San Pedro El Saucito coincidieron en que la falta de lluvias ha hecho que la pastura escasee, ya que las reces no encuentran su alimento de forma natural, lo que ha incrementado la venta y demanda de alimento forrajero.

El tema ha sido expuesto a las autoridades federales en busca de alternativas que ayuden a mitigar los efectos negativos en el sector.