Aún es impreciso el número de osamentas, restos humanos y fosas clandestinas localizados en un campo agrícola de Cajeme, Sonora, sitio que fue descubierto por el colectivo Guerreras Buscadoras de Cajeme.
El fiscal general del estado, Gustavo Rómulo Salas Chávez, informó que los restos continúan en análisis, en espera de los resultados del laboratorio genético.
“Primero, localizar a sus familiares y entregar los restos. Y segundo, determinar las condiciones en las que pudieron haber sido privados de la libertad, para iniciar la investigación concreta que permita identificar a los responsables, y proceder a su judicialización y captura”, declaró.
Según el colectivo, entre las posibles víctimas habría al menos tres mujeres. En el sitio se hallaron prendas, accesorios personales y calzado.
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