Hermosillo, Sonora, 18 de junio de 2025. Tras el accidente ocurrido la madrugada del lunes 16 de junio, en el que una patrulla de la Policía Municipal de Hermosillo fue robada y posteriormente impactada contra un comercio al pie del Cerro de la Campana, se ha confirmado que ni el Ayuntamiento ni el seguro vehicular de la misma patrulla cubrirán los daños materiales ocasionados a la papelería afectada.

El incidente ocurrió cuando un hombre en aparente estado de ebriedad sustrajo una unidad oficial de la Comandancia Sur y condujo sin control hasta estrellarse contra la fachada de Papelería Danny, destruyendo la reja exterior, la puerta de cristal, un refrigerador y varias estanterías de mercancía. El negocio permanece cerrado desde entonces, sin puerta de acceso y con vigilancia permanente de una patrulla policial para evitar robos.

David, propietario del establecimiento, señaló que aunque su negocio cuenta con seguro de daños, se le ha informado que el seguro de la patrulla no cubrirá los desperfectos, dado que el vehículo fue conducido por una persona ajena a la corporación y bajo efectos del alcohol, lo que invalida la cobertura.

“El municipio me dijo que ellos no van a responder, y el seguro del vehículo tampoco. Literalmente me quedo esperando que la Fiscalía pueda lograr que este sujeto pague los daños, si es que puede hacerlo”, comentó el afectado.

Según información de la Fiscalía General de Justicia del Estado, el responsable se encuentra hospitalizado en Hermosillo con fractura de cadera y traumatismo craneoencefálico severo, este último presuntamente causado por las agresiones que sufrió tras el impacto, al ser sacado de la patrulla por un civil y golpeado contra el suelo.

Las autoridades ministeriales han iniciado el proceso de evaluación de los daños y el deslinde de responsabilidades. La Fiscalía anticipó que, en caso de ser dado de alta y contar con capacidad legal y económica, el conductor podría enfrentar cargos por daño en propiedad ajena, robo de vehículo oficial y lesiones, además de estar obligado a cubrir la reparación de los daños ocasionados al negocio.

Por ahora, el dueño de la papelería continúa sin poder operar, y lamenta que un acto de negligencia y violencia lo haya dejado sin sustento hasta que pueda reabrir su negocio al pie del Cerro de la Campana.