Stephanie Turner, atleta de la Academia de Esgrima de Philadelphia, fue descalificada de un torneo nacional realizado en la Universidad de Maryland tras negarse a competir contra Redmond Sullivan, una mujer transgénero. La joven esgrimista se arrodilló en señal de protesta en medio de la pista, sin empuñar su arma ni adoptar postura de combate, lo que llevó al juez a mostrarle tarjeta negra y sacarla del certamen.

El acto de Turner generó reacciones encontradas dentro y fuera del ámbito deportivo. Mientras que algunas voces la acusan de transfobia, otras, como la nadadora Riley Gaines y la extenista Martina Navrátilová, expresaron su respaldo, argumentando que la competencia femenina debe protegerse para garantizar justicia y equidad. El video del momento, ampliamente compartido en redes sociales, reavivó el debate sobre la inclusión de atletas transgénero en disciplinas segregadas por sexo.

Redmond Sullivan, al no tener rival sobre la pista, fue declarada ganadora por incomparecencia y avanzó de ronda. La Federación de Esgrima de Estados Unidos no ha emitido aún un posicionamiento formal, pero el caso podría marcar un precedente sobre cómo abordar estas situaciones en futuras competencias oficiales.